A raíz de los fuertes vientos que comenzaron a abatirse en el sur provincial desde el mediodía del sábado, el oleaje en la laguna de Melincué comenzó a debilitar algunos puntos de las defensas construidas, a la vez que ocasionó el derrumbe de parte del viejo hotel que hace años quedó en medio del espejo de agua.
Al levantarse las intensas ráfagas de viento, fue prácticamente imposible circular por la ruta lindera a la laguna de Melincué y el oleaje comenzó a hacer mella en las defensas de la zona, y también tumbaron uno de los paredones del viejo hotel.
Gabriel Rébora, jefe comunal de Melincué manifestó que “esperemos que aguante un poquito la defensa. Pero pasa siempre lo mismo, después se enojan cuando uno critica —dijo en alusión a un fuerte entredicho que mantuvo con el gobierno provincial—, pero perdimos veinte días de sol, donde no se trabajó. Dijeron que no nos abandonaron, pero con este imprevisto hay una sola máquina para trabajar”, se quejó.
El jefe comunal contó que por el momento es “poca” el agua que está pasando por encima del terraplén, pero que aguardan que cese el viento para que no ponga en peligro la defensa. Y advirtió: “Si sigue este viento tremendo la defensa va a ceder y vamos a estar complicados como hace un mes atrás. El agua (de la laguna) está a 30 centímetros más alto que la ruta, si la defensa cede va a ingresar al ejido urbano, por eso estamos esperando que pare el viento y ponerle parches donde se rompió”.
Ya el lunes desde temprano se reanudaron los trabajos y se podían ver las máquinas de la comuna trabajando mancomunadamente con la provincia para asegurar el terraplén ubicado a la vera de la ruta 90.
La Capital informó además que la Dirección Provincial de Vialidad, a cargo de Pablo Seghezzo, ya destinó 1,5 millones de pesos en la protección de la ruta 90, más 17,7 millones que costaron las 21 mil toneladas de piedra para defensa, otros 1,8 millones en el llenado de 4.500 bolsones para defensa, a los que se suman 500 mil pesos para la compra de bolsones y casi dos en trabajos de defensa y en el camino que lleva a la estación de bombeo. Actualmente se construye un pedraplén que hace las veces de rompeolas.
Fuente: El Sur Diario