Bajo el lema «María, danos tu misericordia», miles de peregrinos participarán este domingo de la fiesta en honor de María del Rosario de San Nicolás, con la que se corona la novena preparatoria por los 33 años del acontecimiento mariano de San Nicolás de la aparición de la Virgen.
Así, y después de una noche de oración, se celebrará hoy, de 6 a 13, una misa a cada hora y se ofrecerá el sacramento de la reconciliación.
A las 14 comenzará la adoración eucarística en el atrio del templo, y a las 15 se realizará la tradicional procesión por las calles del barrio con la imagen de María del Rosario de San Nicolás, para finalizar con la misa central, que presidirá el obispo de San Nicolás, monseñor Héctor Cardelli.
Sobre la celebración
El 25 de septiembre de 1983, la población nicoleña se conmocionó con una noticia: la Virgen se le aparece a una mujer, Gladys Quiroga de Motta, en su habitación mientras rezaba el rosario, vestida de azul. Tenía el Niño en brazos y un rosario en la mano. La Virgen hizo un gesto, como para darle el rosario a Gladys. La aparición fue muy breve, como una especie de anunciación.
El 28 de septiembre y el 5 de octubre de ese mismo año la Virgen volvió a aparecer frente a Gladys. Aún no se había expresado, pero el 7 de octubre, fiesta del Rosario, Gladys le preguntó en una nueva aparición: «¿Qué espera de nosotros?». La imagen se borró y apareció la visión de un templo.
El 25 de septiembre de 1986 el obispo colocó la piedra fundamental del actual Santuario, convertido en destino de procesiones, vía crucis en el campito que se extiende a su alrededor.
El mayor mérito de esta mujer consiste quizás, en la discreta conducta observada, ya que nunca intentó cobrar notoriedad pese al extraordinario privilegio de haber sido destinataria de tal gracia.