La información fue confirmada por el Área Cibercrimen de la Policía Metropolitana. Tiempo atrás, la Fiscalía Especializada en Ciber Delitos de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo de la Dra. Daniela Dupuy, había recibido la denuncia de que una persona había ingresado al campus virtual de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE) para modificar el registro de estudiantes y las notas que aparecían allí.
Entonces, se ordenó a la Policía iniciar tareas investigativas en los servidores de esa casa de estudios. Tras la investigación, lograron detectar al hacker. Los especialistas, en la primera investigación exitosa del grupo, consiguieron constatar que una persona había ingresado en los «sistemas altamente protegidos logrando así tener acceso a las bases de datos de los alumnos, profesores y usuarios administradores de la red. Así mismo detectaron que varias veces el hacker había cambiado las notas de exámenes y trabajos», de acuerdo al comunicado de prensa de la fuerza.
Luego de eso, obtuvieron los registros de conexiones donde figuraban las IP desde donde habían atacado los sistemas de la UADE y a su vez esos registros llevaron hasta la empresa de telefonía celular «Claro», donde también se detectó que habían sido atacados por este hacker.
Además, los expertos lograron concluir que el hacker contaba con un alto nivel técnico y que «había introducido un malware, también llamado código malicioso, en la página de la UADE. Este software malintencionado le dio acceso a la red, una vez allí dentro habilitó las tarjetas de acceso a los molinetes del edificio y con esas mismas tarjetas ingresó a clases, en donde conectaba su notebook para completar la última parte del ataque».
El hacker era alumno de la universidad y sus notas registradas por sistema no se correspondían con las asentadas en papel. Luego, la información los llevó a encontrar su perfil en las redes sociales para así identificarlo.
«Al momento de comenzar con el operativo, se procedió a cortar el suministro de energía eléctrica de la manzana, utilizar dos drones para controlar una posibilidad de fuga. También se analizaron las redes wi-fi, dado que este joven contaba con sistemas de autodestrucción de la información, que había sido detectado en un allanamiento anterior en una causa relacionada con defraudación informática», aseguraron desde la Policía Metropolitana.
Ahora, el hacker está a disposición de la justicia.