Un llamado anónimo había alertado sobre la supuesta presencia de una bomba. Fue una falsa alarma.
Pasadas las 17.15, un llamado anónimo alarmó al personal del hotel 10 de septiembre que la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina tiene en Mar del Plata. En ese lugar se desarrollaba un congreso de Comunicación y la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini tenía a su cargo el cierre. El hotel fue desalojado, se comprobó que todo se trató de una falsa alarma y luego se retomaron las actividades previstas.
«En 10 minutos va a explotar el hotel y se van a morir todos estos montoneros de mierda«, fue lo que dijo la voz que los investigadores intentan identificar.
Según publica el diario marplatense La Capital, se presentaron en el lugar personal de bomberos voluntarios y de la policía de la provincia de Buenos Aires. Efectivos de la División de Explosivos revisó las instalaciones y determinaron que no había ningún paquete sospechoso. Tras la confirmación de la fuerza de seguridad, las actividades siguieron como estaban previstas.
De Bonafini había saltado en los últimos días al centro de la escena por la causa Sueños Compartidos, en la que se investiga el desvió de más de $208 millones que no se destinaron a la construcción de viviendas sociales. Tras varias idas y vueltas, la titular de Madres de Plaza de Mayo se comprometió a prestar declaración indagatoria ante el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, que le autorizó a viajar a la ciudad balnearia.
Anoche, de Bonafini fue recibida por un grupo de militantes y, junto al diputado camporista Andrés «Cuervo» Larroque había instado a «tomar las calles y las plazas» contra el gobierno de Mauricio Macri. Además convocó a una marcha para fines de agosto.
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